A veces nos toca enfrentar misterios que no podemos explicar, misterios que tienen que ver con la pérdida de un ser querido. Dios tiene una visión mayor y solamente ÉL podrá dar la respuesta exacta. Ante lo incomprensible sigamos reconociendo que su evangelio es verdad, que no nos avergonzaremos de su evangelio.
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ENAMORADOS DE JESUS
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